Prefacio

La función regulatoria a cargo del Estado es una actividad de trascendental incidencia en el desarrollo de la economía. Las normas técnicas son una herramienta indispensable para transformar las políticas públicas y el comercio internacional, los cuales giran en torno a mercados caracterizados por la innovación tecnológica, las cadenas globales de valor y la diversificación de sectores. Un adecuado diseño e implementación de las normas técnicas contribuye a la certeza jurídica, previene riesgos a la salud pública, promueve el bienestar de la población, cuida la salud animal y vegetal, protege al medio ambiente y los recursos naturales, y fomenta la productividad en general.

Después de más de 20 años desde su creación, el marco de normas técnicas de nuestro país aún presenta áreas de oportunidad para mejorar la implementación y aplicación de las Normas Oficiales Mexicanas (NOM). Muchas NOMs no cuentan con una infraestructura de evaluación de la conformidad adecuada y raramente son vigiladas por las autoridades correspondientes.

El principal reto que enfrenta el sistema de normas técnicas en México es el conocimiento y cumplimiento voluntario de las NOM. La población no conoce las normas técnicas ni exige su observancia. Aunado a lo anterior, la difusión de las NOMs por parte de las autoridades normalizadoras es incipiente. Finalmente, la interacción entre instituciones para intercambiar información sobre las mejores prácticas de implementación de las normas técnicas es aún limitada. Esta situación nos ubica frente a un gran camino por recorrer en la planeación, diseño, elaboración y aplicación de las NOMs en México.

Una de las acciones más importantes llevadas a cabo por la Secretaría de Economía en sus esfuerzos por encabezar la mejora del sistema de normas técnicas en México, es la cooperación con organismos internacionales como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Dicha cooperación busca adoptar recomendaciones en materia de infraestructura de la calidad en México e implementación de las NOMs, y recogerlas tanto en la propuesta de Ley de la Infraestructura de la Calidad como en la implementación de la Ley de Fomento a la Confianza Ciudadana. Ambas leyes son consideradas por esta administración como instrumentos substanciales para lograr un desarrollo económico incluyente, exigido por las necesidades actuales del país.

La Secretaría de Economía busca promover la concurrencia de las partes interesadas a lo largo del ciclo de la función regulatoria, esto mediante la creación de capacidades técnicas y acciones y estrategias de elaboración, difusión, promoción e implementación de las NOMs. También busca fortalecer su marco legal y crear estrategias para enfrentar las limitaciones económicas y de recursos humanos presentes en la infraestructura de evaluación de la conformidad y en las inspecciones en áreas críticas. Lo anterior con la finalidad de mitigar los desafíos que enfrentan las NOMs buscando desarrollar un enfoque coherente, consistente y basado en riesgo para la evaluación de la conformidad y las inspecciones regulatorias con el fin asegurar y promover el cumplimiento de estas normas.

Las NOMs deben estar alineadas con las políticas públicas derivadas del Plan Nacional de Desarrollo. Deben ser abiertas y accesibles a todos los sectores económicos y sociales, en armonía con las Normas Internacionales para evitar barreras técnicas innecesarias al comercio y para no restringir la competencia interna. Las regulaciones y su correcta implementación promueven el desempeño comercial e industrial y con ello, el desarrollo económico incluyente y al bienestar de la población que México requiere.

 

Dr. Graciela Márquez Colín

Secretaria de Economía, México